lunes, 14 de mayo de 2012

Muchachada around the world. Hoy... Santa Mónica

Santa Mónica es una ciudad de playa al ladito de Los Ángeles. Y pasear por ella es acordarse permanentemente de películas, series y otras americanadas. Llegamos a Santa Mónica con dos propósitos: bañarnos en el Pacífico, y visitar la playa del pueblo de al lado: Venice Beach. Sí, Santa Mónica y Venice Beach son parte de la misma playa, una muy pero que muy famosa.




En la intro del vídeo, además de ver a las "vigilantes" se ve cómo se debe poner la playa en verano. Como era marzo hacía un frío del carajo, así que sustituimos lo de bañarnos en el Océano con meter los piececicos. Y a las supervigilantes las cambiamos por un tipo con mucha ropa. Eso sí, con su caseta, coche y... ¿eso es un flotador? La playa vacía, pero ahí, hay que mantener el orgullo americano bien alto, y subir corriendo a la caseta, por si hay alguien en peligro.


La playa en sí parece la leche, como todo lo americano. Pero es una playa normal. Bueno, normal normal tampoco, porque es más ancha que el carajo, pero toda la infraestructura de playa que acompaña a la arena era cutre tirando a perrofláutica, especialmente en Venice Beach. Y es que cuando uno se mueve en coche a todas partes no le hace falta concentrar en poco espacio todo. Y las cosas terminan como desangeladas.



Sí que era muy curioso el muelle de Santa Mónica. Estos americanos son muy amigos de los muelles, los pier. En muchas ciudades tienen uno, y en el Pier, como la pesca ya no les funciona bien, y el transporte está en muelles más grandes, los pequeños muelles están dedicados al turismo. En Santa Mónica tienen un parque de atracciones, que no pudimos catar, porque domingo a las 7 de la tarde estaba ya todo chapado. Era demasiado tarde para esta gente. Lo que sí molaba mucho era el atardecer.



Bueno, hubo dos cosas del muelle que sí nos gustaron. La primera, una frikada del 15. Tenían en una sala recreativas del año pum. Y encontré un Time Crisis 1 al que jugué. Mis pagas universitarias gastadas en esta máquina dieron sus frutos: 15 años después aún recordaba de dónde salían los bichos. Pero estaba mal calibrada y me mataron rápido. Lo que me impactó fue encontrar otro clásico, original: Street Fighter II.


Y lo segundo, lo que más nos gustó, fue encontrar el final de la Ruta que hizo nacer en nosotros la idea de venirnos a EEUU. Si el otro día os enseñamos el principio, aquí estaba el final de la Ruta. Así que ya podemos decir que, aunque sólo haya sido parcialmente, nos hemos hecho la Ruta 66.

1 comentario:

  1. street fighter II!!!! epico, seguro que te cobraron por hacerte una foto con la maquina, rodeada de cordón de tercipelo rojo...

    Time crisis, pokemon... fuiste un universitario ejemplar josu, un ejemplo a seguir hehe

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